There is no shortcut

El pasado martes 4 de octubre tuvimos la oportunidad de ver a Cliff Berg, padre de Agile 2, en un evento de la BAC patrocinado por TecnoFor y BBVA, celebrado en las instalaciones de la entidad bancaria. Puedes ver el video completo aquí:

Cliff consiguió una exposición inspiradora en su ponencia “there is no shortcut”, en la que nos hizo volver a abrir los ojos y repensar sobre el futuro del agilismo. Porque el movimiento ha evolucionado: ya no hablamos de “agile”, en referencia al Agile Manifesto for Software Development de 2001, ahora hablamos de Business Agility o, simplemente, “agility”, cuyos principios han quedado recogidos en la filosofía Agile 2 por Cliff y sus colaboradores.

Agile 2 rellena los huecos, que la experiencia ha demostrado, que dejó el manifiesto ágil original. Entre otras muchas cosas, Agile 2 habla de la importancia de los datos y hace referencias a la relevancia de las personas y su crecimiento individual, además del crecimiento como parte de los equipos, y de la necesidad de un liderazgo explícito y no sólo de auto-organización.

Cliff también repasó por qué muchas grandes transformaciones, aunque con algunas luces, no han tenido todo el éxito que se les presuponía en estos años. Se han cosechado logros en cuestiones de estandarización, de conseguir procesos repetibles a escala (repetibilidad eficiente) y mejora del flujo, pero en general no se ha conseguido un cambio de mentalidad alineada con los principios ágiles. Y la agilidad necesita de los 3 factores porque de lo contrario, se pierde la capacidad de adaptación. Cliff achacó a los marcos de trabajo ágiles y a algunos de sus creadores el promover una mentalidad más industrial, más orientada a la eficiencia del proceso que al cambio de paradigma. Pese a que nos gustó mucho la exposición de Cliff, no podemos estar de acuerdo en que los frameworks, especialmente SAFe, estén sólo diseñados para mejorar el flujo, si bien es cierto que muchas empresas sólo adoptan la parte más procedimental del framework y existe una obsesión por los procesos y las prácticas. Pero SAFe insiste en la necesidad de cambio de paradigma, de reaprender, de tener un liderazgo ágil como el valor nuclear principal gracias a la formación e involucración de stakeholders y managers desde el inicio de una transformación para que el cambio de mindset suceda. No vemos conflicto con lo que Agile 2 promulga.

En resumen, Agile 2 pone el foco en las oportunidades para seguir evolucionando hacia Business Agility en los próximos años en las organizaciones, especialmente en los aspectos culturales y de comportamiento. Y no hay atajos para llegar allí, no se pueden conseguir milagros con fórmulas rápidas: “there is no shortcut”.